Internet, y, en especial, las redes sociales, por su inmediatez y su creciente popularidad, están provocando que muchísimas personas, con mayor o menor frecuencia, sintamos FOMO: Fear of Missing Out, lo que en español conocemos como Miedo A Perderse Algo (MAPA).
Por ejemplo, cuando se acerca el fin de semana, y abres Instagram o Facebook, puede ser que sientas que todo el mundo que sigues está haciendo algo divertido, están felices, viajando, triunfando en sus negocios o trabajos, tienen la familia perfecta… Mientras que tú, tal vez estás en casa, viendo a tu celular y no sientes que tu vida igual de interesante que las de los demás.
Si te identificas con esta situación, tú también tienes FOMO.
FOMO, acrónimo de fear of missing out, es el «miedo a perderse algo».
Causas del FOMO
El origen del FOMO está muy relacionado al tipo de sociedad en que vivimos:
- Los celulares, tablets y demás dispositivos conectados son herramientas muy potentes, un distractor permanente que puede llegar a condicionar y perjudicar nuestra vida.
- Hoy en día, la sociedad busca lo inmediato, el ahora. Todo parece ir a un ritmo acelerado, rápido, o al menos, tan rápido como la conexión que tengamos a Internet…
- Por eso, sentimos más presión en la toma de decisiones, no queremos perder oportunidades ni queremos quedarnos atrás.
- El mundo digital muestra muchas fachadas. No solemos ver todo el esfuerzo que hay detrás, y eso ha popularizado la búsqueda de gratificaciones instantáneas.
- Cada vez en nuestro entorno hay una necesidad mayor de demostrar en redes sociales lo que hacemos con nuestro tiempo.
- Crear una imagen de perfección y felicidad eterna está de moda.
- Somos una sociedad que se ha vuelto adicta a los cambios, resulta muy atractivo la idea de experimentar la vida de distintas formas, en otras partes del mundo y descubrir qué nuevas posibilidades nos pueden ofrecer.
- La constante necesidad de revisar, usar y estar pendiente de todo lo que ocurre en Internet es una forma moderna de intentar recibir aprobación y admiración de los demás.
Consecuencias
Si no desarrollamos las habilidades y estrategias necesarias para gestionar adecuadamente el FOMO, terminamos por sufrir consecuencias muy negativas como:
- Sentir la necesidad, casi obsesiva o compulsiva, de estar revisando tu celular para intentar mantenerte al día con todo.
- Tu cerebro se comienza a aturdir al dejar que lo invada la compulsión de estar siempre conectados y de revisar todo lo que ocurre en Internet.
- Cuando no te metes en una red social por muchas horas o días, sientes que te quedas atrás.
- Esto empieza a causarte malestar, ansiedad y/o miedo a sentirte excluido socialmente.
- Sentirse abrumados e, incluso, paralizados y ansiosos ante el abanico de posibilidades que se abren ante nosotros.
- Te comparas con lo que ves en redes sociales, y comienzas a sentir emociones como la envidia, la frustración o el miedo a no avanzar…
- Te sientes abrumado, paralizado y ansioso.
- Comienzas a sentir indecisión al pensar que eres incapaz de elegir qué quieres hacer, ante el temor de perder el resto de las opciones.
- Percibes el compromiso como una renuncia a todo lo demás,sientes que si te comprometes con tus metas o con otra personas, te cierras ante otras posibilidades tentadoras, las cuales pueden ser realistas o imaginarias.
- Sientes dificultad para perseverar porque sientes que renuncias a otras opciones igual o más interesantes.
- Tiendes a sobrecargar tu horario, por lo cual te vuelves impuntual: Estás siempre atrapado en un corre corre y te sientes fuera de control.
- El FOMO puede derivar en un cuadro depresivo serio.
Si bien es sano sentir curiosidad por lo que ocurre en Internet, lo importante es impedir que esta curiosidad tome las riendas de nuestras vidas. ¿Quieres convertir el FOMO y sentir la felicidad de perderte lo que pasa en Internet (JOMO)?