¿Cómo le pongo límites a mis hijos en Internet?
Como padres, establecer límites sanos para nuestros hijos en Internet no es tarea fácil. Porque en el intento de proteger su privacidad, podemos extralimitarnos y caer en lo que se conoce como invasión de la privacidad.
En Internet ocurre lo mismo que ocurre cara a cara: Es vital establecer límites y cultivar hábitos sanos, al igual que supervisar lo que hacen nuestros hijos menores de edad.
Los dispositivos digitales de nuestros hijos, desde sus teléfonos inteligentes hasta las tabletas, computadoras portátiles y consolas de juegos, son puertas de acceso a nuevos mundos de información, entretenimiento e interacción con otras personas.
Este maravilloso mundo también ha traído grandes peligros a todos los hogares con conexión a Internet, como: acoso cibernético, pornografía, sexting, juegos de azar y cosas peores.
Por ello, es nuestra responsabilidad, como adultos, evitar que caigan en excesos, y tenemos que adoptar el mismo enfoque para Internet. Cuanto antes comencemos y cuanto más consistentes seamos, mejor.
4 tips para establecer límites sanos para tus hijos en Internet
1. Da el ejemplo: Los adultos también tenemos que regular el uso que hacemos de la tecnología
¿Pasas la vida pegado a tu smartphone o tableta, nunca lo apagas y en cuanto suena siempre corres a revisarlo? Si es así, presta mucha atención: Al igual que los demás planos de la vida, en la crianza digital nuestros hijos aprenden mucho más de lo que hacemos que de lo que les decimos.
Si queremos que nuestros hijos sean asertivos y toman mejores decisiones respecto al uso que hacen de la tecnología, tenemos que comenzar dándoles el ejemplo. Así que los primeros que debemos cultivar límites sanos en el uso de la tecnología somos los propios padres.
2. Establece una dieta digital
Si tenemos hijos pequeños y no establecemos límites, es probable que jueguen todo el día, no hagan las tareas, y no coman otra cosa que dulces… Por eso, nuestros hijos necesitan rutinas y una dieta equilibrada de diversión e interacción en Internet y fuera de línea.
Nunca es demasiado temprano para establecer límites en, por ejemplo, el tiempo que un niño puede pasar usando cualquier dispositivo electrónico.
Tú conoces a tus hijos, así que podrás establecer la cantidad de tiempo de pantalla que te parece más adecuado. Lo vital es ir cultivando en la mente de nuestros hijos que existen reglas y límites, que irán evolucionando según su edad y según las muestras que den de madurez.
3. Confiemos en que nuestros hijos tienen criterio propio
Dependiendo del nivel de madurez de nuestros hijos, nosotros vamos flexibilizando los límites y vamos dejando que progresivamente ellos se sientan responsables de sus acciones, decisiones y omisiones.
Cuando los padres no les damos confianza a nuestros hijos para tomar sus propias decisiones, les estamos quitando la oportunidad de aprender de las consecuencias de sus acciones.
Si bien como padres tenemos la obligación de guiar y proteger a nuestros hijos, la adolescencia, por ejemplo, es un buen momento para probar la capacidad de nuestros hijos de tomar mejores decisiones en el mundo online y cara a cara.
4. Usemos la herramienta de control parental que mejor se adapte a nuestra familia
Actualmente, cada día hay más soluciones automatizadas de control parental. Existe una amplia variedad de aplicaciones móviles y sistemas conectados que podemos usar para poner límites, filtrar o bloquear contenidos, administrar el tiempo de pantalla, e incluso establecer la hora de desconexión del dispositivo.
Conoce más detalles sobre estas herramientas en: Apps para ponerle freno al cyberbullying